Sociedad | Comprometidos | Internacionales

Inclusión, pasar del discurso a los cambios.

EL DISCURSO DE LA INCLUSIÓN EN PERÚ

ACCESIBILIDAD PERÚ

En los últimos años se percibe un interesante incremento en la referencia o recurso a la inclusión en nuestra sociedad, por lo menos en la esfera del discurso. La normativa internacional, con sus grandes acuerdos supranacionales o la deriva continental que viene significando la fuerza de las redes sociales al visibilizar escenas y situaciones concretas de exclusión o de oprobio contra determinados segmentos sociales, han ido poniendo en agenda contemporánea a la inclusión.

De hecho, en Perú tenemos hasta dos ministerios, si no tres, que hacen alusión expresa a la inclusión o, por contraste, a grupos excluidos. El MIDIS, Ministerio de la inclusión y Desarrollo Social o el MIMDES, ministerio de la mujer y Poblaciones Vulnerables, son ejemplos de este creciente interés y compromiso con el tema de la inclusión desde el estado. Pero no solo el estado, también el sector empresarial empiezan a sumarse a esta corriente de preocupación por este aspecto cada vez más relevante de la vida contemporánea en nuestras sociedades.

No obstante y sin intenciones de disminuir el valor de estos loables esfuerzos institucionales, cabe tomarse en cuenta algunas magnitudes que, además considerando que nos aproximamos al primer cuarto de este siglo XXI, deberían constituir indicadores de cara al tema de la inclusión. Magnitudes como el índice de instalaciones públicas que cumplen los estándares de accesibilidad, la cantidad de estudiantes con necesidades especiales que reciben o que siguen sus estudios con el material adaptado según el tipo de discapacidad, el índice de variación de miembros de grupos vulnerables que acceden a la educación superior o los niveles de acceso a empleo de calidad por miembros de grupos tradicionalmente excluidos.

En lo que refiere a la discapacidad, el estado ha adoptado una política conmemorativa, celebratoria, que básicamente consiste en rendir homenaje, en elaborar retórica reivindicativa de las personas con discapacidad con no pocas alusiones compasivas o sensibilizantes para con la sociedad. Una práctica que se ha ido extendiendo por toda la sociedad donde pareciera considerarse que las condiciones de exclusión se pueden compensar con el recurso a los derechos, a la justeza de las reivnidicaciones de las personas con discapacidad y de los grupos excluidos en general.

En tiempos de las conexiones virtuales, del trabajo remoto, en tiempos de la digitalización intensiva y en tiempos de la creciente inteligencia artifical generativa, la institucionalidad peruana y la sociedad en general debería pasar de solo reivindicar derechos a los grupos vulnerables a intensificar procesos y cambios en la situación real de este amplio sector de la sociedad peruana.
Volver a la Página de Inicio

Diagrama